lunes, 27 de mayo de 2013

Las nieves del Kilimanjaro.

¡Para nada!.

Eso de estar a finales de Mayo y que se vea aún la nieve en las montañas de la capital del reino, no es lo habitual y no hay que desaprovecharlo.

Así que para el último sábado en familia, en una temporada, decidí que había que subir a tocar la nieve (la que quedara, aunque estuviera congelada) y a merendar a la brisa de los pinos.

Después de comer, con los niños empaquetados en el coche y a 28º al sol, nos dirigimos rumbo norte, con las montañas aún nevadas  frente a nosotros.

Para variar, acabamos perdidos... He de decir que no conducía yo... No voy a decir nada más al respecto.

Bueno si: pasamos por delante del castillo de Manzanares el Real. ¡hay que ver como está el embalse! ¡nunca lo había visto tan lleno!

Ahora si que ya no voy a decir nada más al respecto.

Lo bueno de perderse es que ves mucho paisaje... y mucho campo...

Ahora si que YA no voy a decir nada más (no tenemos navegador en el coche, en caso de haberlo tenido, creo que el resultado hubiera sido exactamente el mismo).

Cuando llegamos a nuestro destino, una hora más tarde de lo previsto (¡uy, que no iba a decir nada más!) y salí del coche, en manga corta, la temperatura era de 11º...

Y nieve en las cumbres poquita.


Un poco más en la vertiente segoviana del puerto.



Una vez merendados, sentados al sol, foto familiar para el recuerdo, que nos hizo una amable y joven espontánea, era el momento de triscar como las cabras, sendero arriba.

Las vistas para los no miopes, siempre me han parecido espectaculares y era de las pocas veces que subía en muchos años, que ni niebla, ni nubes, ni ventisca que enturbiara el horizonte.


Y donde no soplaba el aire de sierra, se estaba fenomenal. A pesar de todo, no paraba de mirar a lo lejos y pensar.


¿como se puede VIVIR sin aire ahí abajo? ¿como se puede seguir respirando día tras día cuando te falta tu burbuja de oxígeno?


¡Ultimo sábado, en una temporada! ¡podía haber sido mejor! ¡debería haber sido diferente!

4 comentarios:

  1. Perderse por esos paisajes, una aventura para descubrir e improvisar.
    Mis sábados son perderme por el mercado luchando con los precios jejeje!!

    Un abrazo.

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  2. Pues tu "aventura" es mucho más peligrosa que la mía Mar, que no te quepa la menor duda.
    Besos.

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  3. ¡Jajajaja! Mujer, que seguro que era una sorpresa para que disfrutaras más si cabe de desconocidos parajes. Qué bonitas las fotos.
    Un besito.

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  4. ¡que no, que se perdió... y toda esa zona la conozco de mi etapa pescadora.

    Un montón de besos.

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